¿Seguir Esperando o Actuar Ya?
Por: Deisy Viana
Siempre he creído que cada oportunidad que se presenta en la vida es un pequeño regalo, esperando ser descubierto y aprovechado. Es por eso que el año pasado decidí organizar una serie de conferencias sobre neuro oratoria y control del miedo escénico, con el objetivo de empoderar a las personas y ayudarlas a superar sus propios límites. Fue en una de estas ocasiones cuando invité a mi amiga Scarlet a participar sabiendo que sería de gran ayuda para ella.
Déjame contarte que Scarlet por su timidez, siempre había mostrado interés en mejorar sus habilidades de comunicación y vencer su miedo a hablar en público. Sin embargo, cada vez que la invitaba, siempre tenía una excusa diferente. "Estoy esperando a que Marta también se anime a ir," decía con frecuencia, como si necesitara ese empujón extra para dar el paso. Los días se convirtieron en semanas, y las semanas en meses, sin que Scarlet asistiera a ninguna de mis conferencias, su respuesta siempre: "Estoy esperando por Marta"
El tiempo pasó y las oportunidades siguieron su curso. Ahora, Scarlet se encuentra en una situación que nunca imaginó: debe crear videos para sus redes sociales para aumentar sus ventas. Sin embargo, el miedo a la cámara la paraliza. No sabe por dónde empezar, le aterra no saber expresarse y hacerlo mal. El miedo la ha llevado a un punto crítico, donde su negocio y su bienestar dependen de superar esta barrera. Su sensación de frustración es inevitable, ha perdido tiempo y dinero.
Reflexionando sobre la historia de Scarlet, me doy cuenta de lo importante que es no dejar que el miedo y la espera de la aprobación o compañía de otros nos detenga. Muchas personas caen en la conducta de postergación y dependencia debido a factores como el miedo al fracaso, la falta de autoconfianza y la necesidad de validación externa. Estas conductas pueden estar profundamente arraigadas en experiencias pasadas y en patrones de comportamiento aprendidos.
Los riesgos de esta conducta son significativos. Según la psicología, la procrastinación y la dependencia pueden llevar a la pérdida de oportunidades, el aumento del estrés y la ansiedad, y una disminución en la autoestima y el bienestar general. Además, estas conductas pueden convertirse en un círculo vicioso, donde el miedo y la inacción perpetúan aún más el comportamiento evasivo.
La vida nos da incontables momentos para brillar, pero si esperamos a que alguien más nos acompañe en nuestro viaje, podemos perder esos momentos para siempre. La valentía no es la ausencia de miedo, sino la decisión de seguir adelante a pesar de él.
Para aquellos que se encuentran en una situación similar a la de Scarlet, les animo a dar el paso. No esperen a que otros se unan a ustedes para perseguir sus sueños. Tomen el control de sus vidas y enfrenten sus miedos con determinación. Al final, el éxito está en manos de quienes están dispuestos a arriesgarse y avanzar por sí mismos.
Como dice en la Biblia, en el libro de Isaías 41:10: "No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia."
Que estas palabras nos recuerden que siempre tenemos la fuerza y el apoyo para superar cualquier obstáculo, si solo nos atrevemos a dar el primer paso ¿Qué más vamos a esperar?
@dejamecontarte1