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El pastor evangélico estadounidense Kevin Wynne, perteneciente a la Iglesia Bautista Monte Sion, ha generado un intenso debate al destruir una imagen de la Virgen de Guadalupe y de la Santa Muerte. Este controvertido acto ha suscitado gran revuelo en México, país en el que la Virgen de Guadalupe es una figura religiosa ampliamente venerada.
Al defender sus acciones, el pastor Wynne ha argumentado que buscaba demostrar el pecado de la idolatría. No obstante, sus críticos han acusado sus actos de intolerancia y falta de respeto hacia otras religiones.
En sus declaraciones, el pastor enfatizó que la Iglesia Bautista Monte Sion es una iglesia evangélica, lo que implica la creencia en la Biblia como la palabra de Dios, la salvación por gracia a través de la fe en Jesús, y la relevancia de la evangelización.
Estas acciones han generado un fuerte debate en México, resaltando las tensiones y diferencias en torno a las prácticas religiosas y la libertad de culto.