A 192 AÑOS DEL ASESINATO DEL ABEL DE AMERICA
“EL GRAN MARISCAL DE AYACUCHO ANTONIO
JOSÉ DE SUCRE”
04 /06/1830 – 04 /06/2022
Por: Marlin
Villalobos
C.I.: 15.823.766
Historiador
Cuatro disparos de mercenarios
ocultos en el sitio La Jacoba, en la
montaña de Berruecos, Colombia, llevaron a la inmortalidad un 04 de Junio de
1830 a la ejemplar vida de Antonio José de Sucre, uno de los venezolanos más
grandiosos e ilustres de la patria venezolana.
Antonio José de Sucre, fiel y de
lealtad absoluta a Simón Bolívar logro grandes proezas políticas, diplomáticas
y militares derrotando al imperio español en toda Sudamérica. Fue Gobernador de
Perú, Presidente de Bolivia, General en Jefe del Ejército de Colombia y
Comandante del Imponente Ejercito Libertador del Sur, este último cargo dado
por el Libertador Simón Bolívar en el año 1822.
El Gran Mariscal de Ayacucho, título
otorgado por el Congreso Peruano en 1824, por su arrojo, valentía y grandes
dotes como estratega militar en la Batalla de Ayacucho, la cual significo la definitiva liberación del
Perú y el fin del Imperio Español, murió asesinado en una gran
emboscada planeada por el venezolano Juan José Flores y como autores
materiales fueron señalados José Erazo y
Apolinar Morillo, quienes diez años más tarde fueron apresados y fusilados por esta causa.
Es importante destacar, que en la
realización del “Congreso Admirable” los
resultados no fueron los esperados. Bolívar renuncia en Mayo de 1830 y Sucre
considero que su labor militar había concluido, se despide de Bolívar
en 1830 y se dirige a Quito a
conseguirse con su esposa, encuentro que nunca llegara a darse, pues ese día
muy temprano en la mañana, Antonio José
de Sucre toma el camino de su cita
final. Cuando pasó la comitiva, una voz grito: “¡General Sucre!”. El joven General, de apenas 35 años de edad, volteo y en el acto sonaron los
disparos. Solo pudo oírsele decir: “¡Ay
balazo!”. Y cayó muerto el joven General cumanés, víctima de las intrigas y las ambiciones.
Antonio José de Sucre fue
considerado uno de los militares más
completos entre los próceres de
Latinoamérica. Disciplinado, constante, justo, fiel a la causa republicana y de
indoblegable actitud libertaria y vigilante; castigaba sin vacilar los crímenes
y vicios; un hombre de valores
patrióticos suramericanos, de honor, de gratitud y de lealtad. Simón Bolívar al
conocer su muerte dijo: “Se ha
derramado, Dios excelso, la sangre del inocente Abel. Lo han matado porque era
mi sucesor”
En la última carta de Antonio José de Sucre a Simón Bolívar,
escrita en Bogotá en 1830 dice: “Lo
conservare, cualquiera que sea la suerte que nos quepa, y me lisonjeo que usted
me conservara siempre el aprecio que me ha dispensado. Sabré en todas
circunstancias merecerlo. Adiós mi General, reciba usted por gaje de mi amistad
las lágrimas que en este momento me hace verter la ausencia de usted. Sea usted
feliz en todas partes y en todas partes
cuente con los servicios y con la gratitud
de su más fiel y apasionado amigo”.
Los restos del Novel General Antonio
José de Sucre descansan en la Catedral
Metropolitana de Quito, capital de Ecuador.