EL DESAPARECIDO PUEBLODE SAN FERNANDO DE CACHICAMOVILLA DE ESPAÑOLES EN TIERRA DE IPIRE.
Por: Lcda. Marlin Villalobos.
15823766
Historiadora.
Todo lo que ocurre en los pueblos es historia, del pasado o del presente. Hay grandes acontecimientos y hechos pequeños. Todos ellos marchan concatenadamente y se necesitan. Tal como lo describe el Dr. Adolfo Rodríguez, en relación a San Sebastián de los Reyes como pueblo fundador de hatos en el Centro y Oriente del Llano.
“Tierra de Gracia… así llamo Cristóbal Colon, al suelo venezolano, el 31 de julio de 1498, cuando en su tercer viaje inició la conquista de nuestra tierra”
En la colonia, 86 años después, el 6 de enero de 1585 el capitán Sebastián Díaz de Alfaro fundo a San Sebastián de los Reyes (Hoy estado Aragua), la gente de este pueblo se dedicó a la compra y venta de ganado vacuno y zonas aledañas e iniciaban la fundación de hatos en el Centro y Oriente del Llano”. La empresa expedicionaria que había creado el Capitán Sebastián Díaz de Alfaro en San Sebastián de los Reyes controlaba un inmenso territorio que llegaba al río Orinoco, así lo dice el Dr. Edgar Ballen Cáceres en el siguiente párrafo:
“Sebastián de los Reyes, controlaban un inmenso territorio que llegaba al río Orinoco, fundaban pueblos para aumentar su dominio y en ocasiones para proteger a los aborígenes en sus luchas internas y de los mismos colonizadores”.
De esta forma se origina Santa María de Ipire, Iguana, Altamira y después a San Fernando de Cachicamo. Santa María de Ipire era un punto de enlace entre el Centro y Oriente del país, se originó 4 años después de Altamira; ahora es Municipio matriz y en su jurisdicción se encuentra como parroquia.
Es así como un 2 de mayo de 1744, el padre misionero Miguel Cádiz fundo un pueblo exclusivamente de indios que al principio llamo El Salvador y luego Nuestra Señora de Altamira. Establecida con indios caribes y palenques del Orinoco que no pudieron ubicarse en vecino caserío de Iguana porque eran enemigos de los que allí habitaban.
En su territorio se encuentra el desaparecido pueblo San Fernando de Cachicamo, en cuyas ruinas, antropólogos e historiadores el 28 de mayo de 1994, dieron a conocer por primera vez en el Guárico, la presencia de un taller Lítico, en donde nuestro antepasados fabricaban instrumentos de piedra.
Trasládate junto a mí por un momento cuando la máxima jerarquía de la Corona Española autorizo a la congregación de los capuchinos para que fundaran. Se resolvió que en la geografía en lo que es nuestro estado se fundaron dos villas para colonizara y le dieran educación a las misiones de indios que ya estaban establecido surgiendo así en primer lugar la Villa de todos los Santos de Calabozo fundada el 1 de febrero de 1724 y luego San Fernando de Cachicamo, fundada el 14 de septiembre de 1752 por el Padre Jerónimo de Gibraltar. Se inició con 34 familias españolas al posesionarse del lugar derivado su nombre al estar su asiento cercano a la laguna del Cachicamo y en honor al propio Rey Fernando VI. Esta Villa se fundó para colonizar las misiones de Nuestra Señora de Altagracia de Iguana y de Nuestra Señora del Rosario de Altamira.
El 21 de ese mismo mes el Vicario general de la diócesis extendió las licencias necesarias para el Presbítero Prefecto Gerónimo de Gibraltar, le prestase los auxilios especiales por lo que se considera al referido Presbítero como su fundador.
La Villa de San Fernando de Cachicamo evoluciono lentamente en su crecimiento a pesar que se esperaba que lo hiciera con rapidez. En 1755 solo contaba con 24 casa en 1758 llegaban 130 habitantes y en 1764 ya estaba 413, compuestos entre blancos, mulatos y mestizos.
Cuando se decidió su fundación, se pensó en su cercanía al rio Orinoco la cual se estimaba en un día con agua suficiente debido a su cercanía al rio Chivata y Chivatica a su vecindad con la laguna de su mismo nombre. Sus tierras eran aptas para la cría de ganado mayor y para cultivos menores como maíz no muy abundantes frijoles y yuca.
En el Atlas de Agustín Codazzi en uno de sus mapas aparece reseñado el lugar donde estaba ubicado todavía hacia 1875 existía esta población y en el censo realizado en el primer gobierno del General Antonio Guzmán Blanco se hace mención del mismo, donde se estableció que para llegar a él desde Santa María de Ipire, había que pasar por caño Guasguatico, quebrada del Muerto, Chivata, Hatico y Altamira hasta llegar finalmente a San Fernando de Cachicamo, recorriendo un aproximado de 7 leguas según las medidas de ese entonces.
Diversos historiadores sostienen que la existencia de este pueblo, fue corta y accidentada porque sus autoridades se pasaban en pugna con los pueblos vecinos de Altamira e Iguana. En el año 1789 el teniente de justicia de San Fernando de Cachicamo quiso demoler a los pueblos de Altamira e Iguana. Años después San Fernando de Cachicamo fue incendiado y no progreso como si lo hizo Calabozo con 12 familias.
