El jengibre es ampliamente reconocido por su efecto anti-inflamatorio, anti-oxidante, anti-microbiano y energizante en nuestro organismo 1, sin embargo muchas personas no saben que también es un excelente remedio para el cabello. Si eres un amante de esta raíz tuberosa y acostumbras a tenerla en casa, sigue leyendo a continuación y descubre cómo puedes usarla para lucir un cabello fuerte, saludable e hidratado.
Para el crecimiento del cabello
Sin dudas, el jengibre es uno de los mejores ingredientes naturales que puedes usar para promover el crecimiento capilar. Se sabe que sus principales compuestos activos, los gingeroles, ayudan a relajar los vasos sanguíneos y mejoran la circulación de la sangre hacia todas las partes del cuerpo 2, incluyendo el cuero cabelludo. Esto contribuye a una mejor nutrición de los folículos pilosos, y por tanto, a un mayor crecimiento del cabello.
Los gingeroles también tienen efecto antioxidante, de ahí que ayuden a neutralizar la acción de los radicales libres y eviten el daño en los folículos y hebras capilares. En muchos casos, esta es la razón por la que el pelo crece lentamente o se quiebra con facilidad.
Para el encanecimiento
Si bien esto puede considerarse un efecto normal del envejecimiento (también relacionado con la genética), muchas personas, especialmente las mujeres, no se sienten a gusto con la aparición de las canas. Si este es tu caso, debes saber que el jengibre es un buen remedio para el cabello canoso. Algunos naturistas y autores reconocidos 4 aseguran que su uso frecuente ayuda a revertir el proceso de encanecimiento y devuelve parte de su color natural.
Una forma efectiva de usarlo consiste en preparar una mezcla con ½ cucharadita de aceite esencial de jengibre, ½ cucharadita de aceite esencial de lavanda y 5 cucharaditas aceite de sésamo; agrega todos los ingredientes en un frasco limpio de cristal y agita para combinarlos bien. A continuación aplica una pequeña cantidad de esta mezcla sobre las raíces del cabello, dejando actuar durante 20 minutos antes de lavarlo con champú. Se puede repetir diariamente, siempre y cuando no cause irritación en el cuero cabelludo. Las personas con cuero cabelludo sensible deben disminuir la frecuencia a 2-3 veces por semana.
Nota: la mezcla restante se puede conservar en un lugar fresco, oscuro y seco durante 60 días para su uso posterior.
Otra opción consiste en rallar varios trozos de jengibre y mezclar la ralladura con un poco de leche hasta formar una pasta espesa. Luego se aplica sobre el cabello canoso, se deja actuar durante 10 minutos y se enjuaga con abundante agua, repitiendo el proceso una vez por semana.
Curiosamente, también hay personas que usan el jengibre para aclarar el cabello. Aplicar mascarillas de jengibre frecuentemente, o enjuagarse el pelo con una infusión de jengibre fresco, puede aclarar ligeramente su tono natural.
Para el cabello seco
Cuando se tiene el cabello demasiado seco es importante encontrar productos que lo nutran y lo suavicen, ya que de lo contrario este se vuelve quebradizo y se rompe con mucha facilidad. Para esos casos es muy recomendable usar el jengibre, especialmente en forma de mascarilla. Sus vitaminas, minerales, aceites y demás compuestos activos lo convierten en un excelente acondicionador, que ayuda a hidratar el pelo seco, le aporta brillo y previene su quiebre.
Por lo general se recomienda mezclar el jengibre fresco rallado con algún aceite humectante, como el aceite de jojoba, de almendras dulces, de coco o de argán. Su uso es muy sencillo:
Mezcla los ingredientes (jengibre + aceite de tu elección) hasta formar una pasta cremosa.
Aplícala sobre el cuero cabelludo y extiéndela hacia las puntas.
Enrolla el cabello y cúbrelo con un gorro de ducha.
Deja reposar durante 10 minutos.
Enjuaga y lava el cabello como de costumbre, preferiblemente con un champú humectante.
Para el cabello graso
En el otro extremo están las personas que tienen el pelo demasiado grasoso, sin embargo el jengibre también es muy útil en esos casos. Un remedio muy popular para combatir el exceso de grasa del cuero cabelludo consiste en mezclar ½ taza de polvo de raíz de sagú (maranta) con 1 cucharadita de jengibre en polvo (o 10 gotas de aceite de jengibre). La mezcla se coloca en un recipiente diseñado para espolvorear, de forma que podamos aplicarla fácilmente sobre las raíces.
Divide el pelo en secciones y espolvorea este polvo hasta cubrir la mayor parte del cuero cabelludo; masajea con las yemas de los dedos para que el polvo de jengibre y sagú absorba todo la grasa, y luego deja actuar durante varios minutos antes de peinar o lavar. El resultado será un cabello más limpio, sedoso y seco. Dependiendo de qué tan graso sea el pelo, esto se puede repetir todos los días o 3-4 veces por semana.
Para la caída capilar
Otro beneficio muy conocido del jengibre es que ayuda a prevenir la caída del cabello. El tubérculo fresco del jengibre es rico es vitaminas y minerales esenciales (magnesio, potasio, fósforo) que sirven para nutrir los folículos pilosos, haciéndolos más fuertes y resistentes a la pérdida capilar.
Así mismo, las propiedades antimicrobianas del jengibre 5 ayudan a combatir la caspa, una causa común de la caída del pelo. Aplicar mascarillas de jengibre en el cuero cabelludo 1-2 veces por semana es una buena alternativa para eliminar la caspa, arrastrar celular muertas, hongos, bacterias, y frenar la alopecia de manera natural.
Para fortalecer el cabello
El jengibre también contiene cadenas de ácidos grasos, como el ácido linoleico, que ayudan a nutrir la fibra capilar, manteniéndola saludable y fuerte. Una manera muy sencilla de fortalecer el cabello consiste en mezclar agua con polvo de jengibre en un recipiente de spray, agitar bien para diluir y aplicarlo sobre el cabello varios minutos antes de lavarlo. Otra opción puede ser agregar el polvo de jengibre directamente al acondicionador que usas después de cada lavada, dejándolo actuar durante al menos 10 minutos.
Después de un tiempo podrás notar que tienes un cabello más fuerte, voluminoso, libre de caspa y con menos puntas abiertas.
Cuando se trata de usar el jengibre como ingrediente en remedios caseros para el cabello, una de las dudas frecuentes es si la raíz del jengibre es más efectiva que el polvo de jengibre. Usar jengibre molido puede ser la opción más conveniente, sin embargo la raíz fresca contiene más nutrientes y aceites esenciales, de ahí que se considere la opción más beneficiosa. En adición a esto, algunos productos de jengibre en polvo pueden contener agentes colorantes que causan cambios indeseables en la tonalidad del pelo.
Teniendo esto en cuenta, veamos cómo se prepara la mascarilla de jengibre más sencilla y rápida para fortalecer tu melena, mantenerla hidratada, libre de caspa, e impulsar su crecimiento.
Receta básica: Pasta de jengibre para el cabello
Corta y pela un trozo de raíz de jengibre, lo suficiente como para obtener 2 cucharadas de ralladura.
A continuación agrega 1 cucharada de agua y remueve para formar una pasta ligera (si es necesario, agrega un poco más de agua).
Aplica esta pasta en todo el cuero cabelludo y déjala reposar durante 45 minutos o 1 hora.
Pasado ese tiempo, enjuaga con abundante agua y lava el cabello levemente con un champú suave. Repite el procedimiento 2 veces por semana, especialmente si estás experimentando una caída severa del cabello, si tienes pelo graso, seco, o si notas que su crecimiento es muy lento.
Gracias a sus propiedades antimicrobianas, antioxidantes y nutritivas, esta pasta de jengibre es una de las formas más simples y efectivas de mantener el cabello largo saludable, voluminoso y libre de caspa.
Masajes con aceite de jengibre
Así mismo, se puede utilizar el aceite de jengibre, una opción para aprovechar al máximo los aceites naturales del tubérculo. Si quieres saber cómo hacer aceite de jengibre para el cabello, solo tienes que seguir las siguientes instrucciones:
Enjuaga varios trozos de raíz de jengibre fresco (con cáscara), aproximadamente el equivalente a 1 taza.
Escurre y deja secar al aire libre durante varias horas.
Vierte ½ taza de aceite de oliva o aceite de coco en un recipiente apto para horno; corta y ralla los trozos de jengibre.
Ahora agrega el jengibre rallado al aceite y lleva el recipiente al horno para que se cocine a fuego bajo (150 grados Fahrenheit) durante 2 horas.
Pasado ese tiempo, retira la mezcla del horno, deja refrescar y fíltrala para extraer los restos del jengibre.
Transfiere el aceite resultante a un recipiente pequeño de cristal, tapa herméticamente y almacénalo en un lugar fresco y seco.
Este aceite de jengibre se puede aplicar dando masajes sobre el cuero cabelludo y toda la fibra capilar, o usar como sustituto del jengibre fresco en la elaboración de mascarillas. Sus principales beneficios son la eliminación de la caspa y el exceso de grasa, la estimulación del crecimiento, la prevención de la alopecia y el fortalecimiento del cabello dañado.
Jengibre en el champú
Otra alternativa mucho más sencilla puede ser usar el jengibre para el cabello mezclado en el champú, pero en este caso no se recomienda el jengibre rallado, sino cortado en rodajas finas, en aceite o en polvo. Lo único que debes hacer es pasar cierta cantidad de tu champú regular hacia un nuevo envase y agregarle varias rebanadas de jengibre fresco pelado (se puede sustituir por 1 cucharadita de jengibre molido o 10 gotas de aceite de jengibre); deja reposar durante al menos 2 días para que los compuestos del jengibre se liberen en el champú y tengan un mayor impacto en tu cabello.
Mascarillas de jengibre para un cabello extra largo, sedoso y con volumen
Canela y jengibre
Al igual que el jengibre, la canela estimula la circulación sanguínea en nuestro cuerpo 6. Esto hace que exista un mayor flujo de sangre hacia los folículos pilosos, y por tanto, un mayor crecimiento natural de la fibra capilar. Una buena forma de combinar los beneficios de la canela y el jengibre para el cabello es preparar una pasta casera mezclando jengibre rallado con canela en polvo; se aplica sobre el cuero cabelludo, se masajea con las yemas de los dedos para que penetre y se deja actuar durante varios minutos antes de enjuagar con abundante agua. Repetir este proceso al menos 1 vez por semana acelera el crecimiento del cabello y ayuda a prevenir su caída. Leer más en: Jengibre y Canela para el Cabello
Jengibre y sábila
Esta es una de las combinaciones más utilizadas para hidratar, dar brillo y mejorar el aspecto del cabello canoso. Lo único que debes hacer es fusionar 1 cucharada de gel puro de aloe vera con 5 gotas de jugo de jengibre hasta formar una mezcla ligera. Luego aplícala sobre el cuero cabelludo y masajea con movimientos circulares; deja reposar durante 30 minutos y a continuación lava como de costumbre con tu champú habitual.
Jengibre y miel
La mezcla de jengibre con miel es excelente para hidratar el cabello seco, fortalecer, acelerar el crecimiento, eliminar bacterias y otros gérmenes del cuero cabelludo 7, e incluso para aclarar el cabello de forma natural; la miel contiene una enzima conocida como glucosa oxidasa, la cual es capaz de liberar peróxido de hidrógeno cuando permanece en el cabello durante mucho tiempo.
Ambos ingredientes (miel y jengibre rallado / en polvo) se pueden combinar y aplicar en forma de mascarilla, dejando actuar durante 15-20 minutos antes de retirar con abundante agua y champú. Su uso frecuente te ayudará a lucir un cabello más nutrido, brilloso y largo, así como un cuero cabelludo libre de infecciones.
Jengibre y cebolla
Cuando se trata de fortalecer y estimular el crecimiento del cabello, la combinación de jengibre y cebolla puede hacer una gran diferencia. En adición a los beneficios del jengibre, la cebolla es ideal para promover la regeneración del folículo debido a su alto contenido de azufre. La potencia de los compuestos activos en esta mezcla ayuda a estimular el crecimiento capilar a partir de folículos latentes, haciendo que el cabello se torne más grueso, largo y voluminoso 8. De hecho, muchas personas acostumbran a poner cebolla y jengibre en el champú para combatir la alopecia.
La siguiente preparación es una forma muy sencilla y efectiva de obtener todos sus beneficios; solo necesitarás:
2 cucharadas de jengibre rallado
1 cebolla rallada
Pasos:
Coloca la cebolla rallada y el jengibre rallado dentro de una gasa limpia.
Envuelve y exprime para extraer el jugo de esta mezcla en un recipiente.
Aplícalo en todo el cuero cabelludo con ayuda de una bola de algodón y deja actuar por 20 minutos antes de lavar el cabello.
Puedes repetir este tratamiento casero hasta 3 veces por semana para ver resultados más rápidos.
Ajo y jengibre
Al igual que la cebolla, el ajo también es un bulbo rico en compuestos de azufre, de ahí que estimule el crecimiento del cabello a partir de folículos pilosos latentes. Así mismo, se ha observado que sus compuestos controlan la proliferación de hongos y protegen a las células productoras de queratina en el cuero cabelludo. 9 10
Una forma efectiva y segura de usarlo consiste en mezclar 1 cucharadita de jengibre rallado, 2 cucharaditas de miel, 2 cucharadas de aceite de coco y 2 dientes de ajo triturados hasta obtener una pasta; luego se divide el cabello en secciones y se aplica la mascarilla regeneradora en todo el cuero cabelludo, dando masajes ligeros con las yemas de los dedos. Se deja reposar durante 30 minutos y finalmente se lava bien el cabello con champú. La recomendación general es repetir el procedimiento 1-2 veces por semana.
Otra opción podría ser agregar rebanadas de ajo y jengibre dentro del champú que usas habitualmente, de modo que los compuestos activos se liberen directamente en el producto.
Vinagre de manzana y jengibre
El jengibre se suele combinar con vinagre de manzana para nutrir, hacer que el cabello crezca más rápido o para aclarar su color sin necesidad de usar productos químicos decolorantes. El vinagre de manzana es altamente valorado por sus propiedades antifúngicas 11, anti-inflamatorias y alcalinizantes; es ideal para combatir la caspa, el cabello graso y las infecciones del cuero cabelludo.
Enjuague de vinagre y jengibre para un cabello limpio, brilloso y libre de sebo
Ingredientes:
Polvo de jengibre
Vinagre de manzana (preferiblemente sin filtrar)
Agua destilada
Instrucciones:
En un recipiente agregue 50 ml de vinagre, 50 ml de agua y 2 cucharaditas de jengibre molido.
Agite bien la mezcla para que se integren los ingredientes.
Lleve el recipiente a un rincón oscuro y deje reposar durante 1 semana aproximadamente. Agite cada cierto tiempo.
Después de una semana, la infusión estará lista para aplicar sobre el cuero cabelludo. Se recomienda aplicar primero en el cuero cabelludo y luego ir extendiéndola desde medios a puntas del cabello. Se deja reposar durante 10 minutos y se procede a enjuagar y lavar como de costumbre.
Jengibre y limón
Las propiedades antisépticas, alcalinizantes y antioxidantes del limón combinadas con las propiedades antimicrobianas y estimulantes del jengibre hacen una pareja perfecta para restaurar el pH del cuero cabelludo, promover el crecimiento del cabello y combatir la caspa. Sin embargo, uno de los principales usos de esta combinación es el aclarado natural del pelo, especialmente durante el verano.
La mascarilla típica de jengibre y limón se prepara con:
2 cucharadas de jengibre rallado
3 cucharadas de aceite de sésamo
1 cucharada de jugo de limón
Se mezclan todos los ingredientes hasta obtener una pasta fina; se aplica en el cuero cabelludo y se extiende por todo el cabello; se deja actuar durante 30 minutos y finalmente se enjuaga antes de lavar con champú. El tratamiento se puede repetir 2 veces por semana.
Nota: Además de las combinaciones anteriores, otras mezclas populares para el cabello son el jengibre con moringa, aceite de coco, aceite de oliva y aceite de argán.
Estos tratamientos caseros con jengibre no solo son rápidos y fáciles de utilizar, sino también muy económicos en comparación con las mascarillas comerciales. Por si fuera poco, los resultados suelen ser sorprendentes, a diferencia de tantos productos que parecen no tener efecto, ni a corto ni largo plazo.