Científicos de la Universidad de Illinois (Chicago, EE.UU.), han descubierto que la azitromicina, un antibiótico usado como tratamiento experimental del covid-19, puede potenciar reacciones cardiacas cuando se usa combinada con otros medicamentos.
Los resultados del estudio, que fueron publicados el pasado 15 septiembre en la revista Jama Network, mostraron que el riesgo de sufrir disfunciones del corazón, incluidos desmayos, palpitaciones y paros cardiacos, aumenta en un 40 % si se toman la azitromicina a la vez que otros medicamentos que afectan a los impulsos eléctricos del corazón, en especial al intervalo en el ritmo eléctrico llamado intervalo QT.
Según indica el estudio, «resultado primario consistió en episodios cardíacos, incluidos síncope, palpitaciones, arritmias ventriculares, paro cardíaco o muerte como diagnóstico primario de hospitalización a los 5, 10 y 30 días» desde el inicio del tratamiento.
Estos medicamentos incluyen tratamientos para la presión arterial, como inhibidores de la ECA y betabloqueantes, algunos antidepresivos, medicamentos opioides e incluso relajantes musculares, e incluso medicamentos contra la malaria como la hidroxicloroquina y la cloroquina, que también son usados como tratamiento experimental para la nueva enfermedad por coronavirus.
«Aunque la azitromicina es una terapia segura, los médicos deben considerar cuidadosamente su uso entre pacientes que utilizan simultáneamente otros fármacos que prolongan el intervalo QT», advierte el estudio.