Sigue leyendo y prepárate a disfrutar de un elegante desayuno o como los ingleses, de una merienda única para acompañar el café. ¡No dejes de probarlos!
Ingredientes:
250 gramos de Harina de trigo
5 gramos de Sal
5 gramos de Levadura fresca
½ cucharadita de Azúcar
30 gramos de Mantequilla
75 mililitros de Leche
75 mililitros de Agua
Aceite
Preparación:
Para empezar, lo primero que debemos hacer es la mezcla de harina tamizada con la sal, el azúcar y la levadura fresca desmenuzada.
A continuación ve añadiendo poco a poco la leche con un poquito de agua templada. Ve removiendo el conjunto para formar la masa de los muffins salados.
Finalmente, incorpora la mantequilla y amasa un poco hasta más hasta conseguir una masa completamente lisa y homogénea.
Forma un bola y tapa con un paño para que fermente y duplique su volumen. Cuando esto suceda, aplasta ligeramente la masa con la yema de los dedos para liberar un poco el gas, entonces extiende sobre la mesa trabajo, previamente enharinada.
Estira con ayuda de un rodillo hasta dejar la masa de los muffins caseros de un dos centímetros de grosor.
Ahora, utiliza un cortador circular o un vaso para cortar las piezas de masa que serán nuestros muffins salados. Esta cantidad de masa debe alcanzarte para sacar unas entre 8 y 10 panes.
Cuando ya los tengas, vuelve a tapar todo con un paño y deja que fermente durante media hora hasta que vuelvan a aumentar su tamaño.
Para cocinarlos, unta unas gotas de aceite en un plancha y llévala al fuego hasta que esté bien caliente. Entonces, coloca los muffins con mucho cuidado en la plancha y mantén la cocción a fuego medio con la sartén tapada. Debes esperar unos 8 minutos por cada lado para que los muffins i se hagan bien.
Los muffins o este pan en sartén, es un clásico en el desayuno así que los puedes acompañar con un poco de mantequilla y mermelada casera, unos huevos revueltos y un café. ¡A disfrutar!